Hay distintas técnicas que los retailers ponen en práctica en sus tiendas para incitar a que los consumidores compren, como son el olor, el color o la colocación de los productos. Otro factor decisivo es la música. Numerosos estudios han demostrado que el hilo musical en las tiendas no está ahí porque sí, sino que tienen un papel fundamental en la influencia a la hora de comprar.
El hilo musical, pues, no es tan sólo un relleno acústico para el vacío y tampoco está orientado a hacernos más llevadera la estancia, sino que tiene un componente que afecta a la conducta de los compradores y, en consecuencia, a las ventas de la tienda en cuestión. Es más, distintos estudios han demostrado que
el ritmo, el tono y el estilo de música utilizado conducen a distintas conductas sobre el consumo.