El interiorismo comercial para tiendas de alimentación y restaurantes pone la mirada en los techos. Hasta hace un tiempo eran los grandes olvidados en decoración, y sólo se les tenía en cuenta para colocar la iluminación. Hoy cobran protagonismo con la intención de causar impacto y conseguir proyectar un ambiente de curiosidad, elegancia y modernidad a un establecimiento.

Los restaurantes utilizan desde lámparas colgantes hasta herramientas de cocina o simplemente el producto, pueden ser buenas ideas para decorar techos y captar la atención. Todo lo que se decida colgar debe seguir siempre una temática relacionada con el negocio y la imagen corporativa, para otorgarle un sentido.

Es importante ser llamativos y quedarse grabados en la mente del consumidor, pero sobre todo se debe tener en cuenta que si se sobrecarga el interiorismo del local se pierde su objetivo, “menos es más”. Por ello los tonos claros y las maderas son los que mejor acogen la decoración en los techos. Si queremos que impacte deberemos cederle protagonismo, y disminuir otros elementos decorativos.

Es también fundamental conocer y diferenciarse de la competencia, además de no ponerse al servicio de las modas ya que la propia razón de ser de un restaurante lo convierte en un proyecto atemporal.

Hay muchos factores que debes considerar si el interiorismo gastronómico te interesa, por eso te damos algunos consejos para conseguir que tu restaurante sea el mejor.

1. Funcionalidad

Uno de los requisitos indispensables en la planificación de un proyecto comercial es conseguir la comodidad del chef y su equipo, así como la de los clientes que vayan a visitar el restaurante. De este modo se logrará que el restaurante además de ser bonito sea funcional. Un reto al que el arquitecto encargado del proyecto debe enfrentarse.

Se debe precisar de un espacio destinado a servir los platos ya terminados, que debe ocupar un lugar privilegiado en la cocina para facilitar el acceso de camareros y personal de sala, sobre todo busca minimizar los desplazamientos para ahorrar tiempo y hacer el trabajo de los empleados más sencillo.


2. Intimidad

La intimidad es precisamente uno de los aspectos que más valoran los clientes y que aporta valor añadido a su experiencia gastronómica. La distribución de los espacios es crucial para conseguir que los clientes preserven cierta intimidad respecto al resto de mesas, sin que esto entorpezca el trabajo del personal de sala.

3. Iluminación

La elección de la iluminación es también una decisión fundamental ya que debe garantizar la ausencia de sombras molestas o penumbras, así como posibles excesos de luz y deslumbramientos para hacer que los clientes se sientan cómodos.


4. Acústica

El aspecto esencial en cuanto a la acústica de un restaurante es su reverberación. Es primordial impedir los efectos negativos de la misma en la comodidad de los clientes.

Para ello, escoger los materiales adecuados es la clave. Superficies como la madera o los textiles logran absorber el sonido y atenuar la posible reverberación.


5. Interiorismo sensorial

Una buena climatización del espacio es indispensable para mantener una temperatura óptima que satisfaga las necesidades de los clientes.

Otro punto es la inevitable cadena de olores que se generan dentro de un restaurante. Por ello, se debe prestar especial atención a los sistemas de renovación del aire para conseguir que el olor no cobre especial protagonismo más allá del de los propios platos que se encuentran en la mesa.


6.Mobiliario

El mobiliario es la cara más visible de la imagen del restaurante. No solo debe estar en armonía con el resto de elementos del espacio, garantizar la comodidad y la buena distribución del espacio y no entorpezca el trabajo, sino que además deben ser cómodos y estéticamente agradables para que la experiencia de los clientes sea única.


7. Elección de los materiales 

El último, pero no menos importante, la elección de materiales es una parte esencial, ya que de no hacer una buena elección de materiales el resto de los factores quedarán eclipsados. Hay que recordar que todos los elementos juntos son los que convierten al restaurante en único y le permiten hacer frente a todos los requisitos mencionados.

En primer lugar, los materiales deben comunicar los rasgos diferenciadores del restaurante. Su elección no será la misma si se trata de un restaurante de comida tradicional que si su actividad es la cocina de fusión. Materiales como la madera, la piedra o el hierro confieren un aspecto más tradicional, mientras que los revestimientos o pinturas más actuales ofrecen una visión más contemporánea.

Por último, estudiar el mantenimiento necesario para cada material y las implicaciones económicas, garantiza una forma objetiva de generar mayor número de clientes y calidad de satisfacción dentro de un restaurante.